Los adultos mayores de más de 60 años con condiciones pre-existentes como diabetes son más vulnerables al COVID-19.
Las personas con diabetes constituyen una población de alto riesgo frente al COVID-19, debido a que las fluctuaciones en los niveles de glucosa en la sangre hacen que su tratamiento sea más complicado, explica el Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (INDEN), al referirse al tema de la reinserción de los empleados diabéticos a sus trabajos.
“Es nuestro deber aconsejar a las personas que padecen diabetes para que se organicen y establezcan protocolos de protección personal de forma estricta en su lugar de trabajo, a fines de conservar su salud y evitar situaciones complejas”, consideró el doctor Ammar Ibrahim, director del INDEN.