La entidad izquierdista denominada Movimiento Caamañista (MC) opinó que el nuevo gobierno de Luis Abinader, aunque con nuevas caras, es parecido al de su antecesor Danilo Medina porque está dominado por el gran empresariado.
Indicó que la nueva administración tiene una «mayor presencia directa y estructural de los mega-millonarios», y se ha caracterizado por el «manejo improvisado y condicionado de la COVID 19», en el que predominan los intereses del gran capital privado, por encima de la salud del pueblo dominicano.
La posición del MC está contenida en un mensaje de fin de año, firmado por Narciso Isa Conde, cuyo texto es el siguiente:
«En correspondencia con la realidad -y no con la fantasía y los shows mediáticos oficiales- los hechos y medidas gubernamentales del 2020, y particularmente del nuevo Gobierno de Luis Abinader-PRM, se han caracterizado por:
1.-Sustitución del ya desacreditado gobierno mafioso de Danilo Medina-PLD por el de Luis Abinader-Grupo Vicini-gran empresariado. Esto es, reemplazo de un gobierno de las derechas neoliberales por otro parecido con nuevas caras y mayor presencia directa y estructural de los mega-millonarios.
2.-Manejo improvisado y condicionado de la COVID 19, en el que predominaron persistentemente los intereses del gran capital privado, por encima de la salud del pueblo dominicano; concluyendo el año con un nuevo rebrote que habrá de impactar negativamente el inicio del 2021.
Ausencia a lo largo de la pandemia de un plan integral anti-Covid y presencia reiterada de un costoso desprecio por las estrategias de erradicación o minimización del contagio; acompañado a la vez del bloqueo a las valiosas cooperaciones china y cubana por imposición de EE.UU.
3.-Política exterior totalmente y vergonzosamente subordinada a EEUU, favorable a sus designios intervencionistas en el Continente, cónsona con su agresividad contra Venezuela Bolivariana, plegada a la hostilidad contra Cuba, Rusia China, Irán, Palestina… y afín al reaccionario Grupo de Lima tutelado por EU y UE.
4.-Conformaciòn de un gabinete y un tren gubernamental, que con un fuerte representaciòn del capital privado y de una tecnocracia a su servicio, han logrado cargar sobre la pobrecía y sectores medios todo el peso de la crisis agravada; ayudando al mismo tiempo a proteger o multiplicar las fortunas de una parte de los mega-ricos, e instrumentando también nuevas modalidades de corrupción e impunidad.
Las bases de ese derrotero han sido sentadas con el anuncio de nuevas privatizaciones (ventas de activos del Estado e impulso a las APPs bajo arbitraje y conducción privada), la derivación al sector privado de una parte de los fondos del 4% que debe destinarse íntegramente a la educación pública, el financiamiento parcial del presupuesto 2021 por Barrick Gold y Banca Privada con sus onerosos condicionantes, y un voluminoso y lesivo endeudamiento externo bajo tutela del FMI.
La nueva corrupción y la impunidad presentan ya manifestaciones concretas como la promoción presidencial a la corporación TESLA de Elon Musk, la alianza del PRM-Abinader con Leonel Fernández y su pandilla de la FP, y la evidente protección del Poder Ejecutivo al nuevo Administrador del Banco de Reservas implicado en la estafa de los Sùper-Tucanos, al Ministro Jorge Mera que funge de abogado de “El Fantasma”, y a grandes empresarios estafadores del Estado.