Un día después de las medidas anunciadas por el Consejo Nacional de Migración, luego de una reunión con el presidente de la República, Luis Abinader, las reacciones de sectores gubernamentales, empresariales y sociales exponen la realidad de los extranjeros en el país.
Las disposiciones, que incluyen un ultimátum a los empresarios sobre la contratación irregular de extranjeros y limitar la entrada al país de extranjeras embarazadas, fueron a-nunciadas casi una semana después de que el mandatario dominicano advir- tiera en su discurso ante la septuagésima sexta Asamblea General de la ONU que “no hay, ni habrá, una solución dominicana a la crisis de Haití”.AIRD apoya ultimátum
Al comentar sobre la disposición de otorgar un plazo de tres meses para que las empresas que tienen empleados extranjeros de forma irregular se normalicen según la Ley Nacional de Migración, la vicepresidenta ejecutiva de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AI- RD), Circe Almánzar, apoyó la medida.
La norma establece que el 80 % de la mano de obra debe ser dominicana, lo que está en vigor desde 1992, pero que hasta ahora ha sido letra muerta.