Un hombre que pagó a otro para que le lanzara ácido del diablo a su expareja con la intención de “desfigurarle el rostro y el cuerpo” fue condenado a 30 años de prisión por el Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Judicial de Santiago.
Cándido Fausto Félix Abreu Corona fue sentenciado a esa pena por la corte, compuesta por los jueces José Francisco de Asís, Deyanira Méndez y Alicia Mabel Guzmán, que acogieron el pedido del Ministerio Público.
Conforme a una nota del órgano acusador, Abreu Corona ordenó la macabra acción ante la negativa de su expareja a retomar la relación sentimental que tenían, la cual la víctima había concluido debido a los abusos físicos y psicológicos a que era sometida.