El defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, acudió a presentar formal querella ante la Fiscalía y la Procuraduría por la agresión que fue objeto este lunes por parte de miembros de la Dirección Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), en el marco de una inspección que realizaba en el Centro de Retención Vehicular (canódromo) tras denuncias de irregularidades.
De acuerdo a una nota de prensa del órgano independiente: «El incidente se produjo cuando el defensor del Pueblo, acudió a visitar el canódromo y, pese a identificarse, procedió a verificar las condiciones en que se encuentran miles de vehículos ocupados por parte de la Digesett, a raíz de quejas presentadas por los ciudadanos, de que no cuidan los vehículos retenidos, lo entregan en malas condiciones o piden dinero a cambio».
Agregó que durante la visita los agentes de la Digesett que prestan servicios en el canódromo rompieron las cámaras de fotografías y videos y celulares a los periodistas de los diferentes medios de comunicación y personal del Defensor del Pueblo que acompañaban a Ulloa. También agredieron físicamente a una periodista y al secretario general del Defensor del Pueblo, Harold Modesto.