El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha defendido en un simbólico acto y arropado por los miembros de su Gobierno los logros alcanzados desde que recogió el bastón de mando del país sudamericano hace exactamente un año, un hito que viene marcado en los días previos por las polémicas que rodean a su hijo Nicolás y que ponen en tela de juicio la financiación de la campaña electoral.
El Puente de Boyacá, escenario de la batalla más simbólica de la independencia colombiana, ha acogido el acto de reivindicación del Gobierno, en el que los ministros han leído incluso un comunicado de apoyo a Petro, tanto a su labor política como a su «honestidad». «Presidente, siga liderando con su ejemplo y sus ideas, que al lado suyo hay millones de colombianos que entienden qué es ser una potencia mundial de la vida», reza la nota leída por la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.
Parte de los logros defendidos por el gabinete han formado parte además del discurso del presidente, que ha citado como éxitos el aumento del salario mínimo o la creación de empleo, así como avances en materia de transición energética y soberanía alimentaria. Además, ha abogado por seguir trabajando para que los campesinos y las comunidades desfavorecidas recuperen los derechos perdidos.