Italia impuso desde hoy limitaciones a los viajes entre regiones, con algunas excepciones, una medida destinada a frenar la propagación del coronavirus y con la que el país empieza a prepararse para el confinamiento navideño de esta semana.
El Gobierno italiano ha llevado a cabo «el sacrificio» de limitar la movilidad durante esta semana en la que dará inicio la apreciada Navidad y las primeras restricciones, las más leves, entran en vigor ya desde este lunes 21 de diciembre.
Desde hoy queda prohibido cualquier viaje entre regiones del país, así como desde o hacia las provincias autónomas de Bolzano y Trento (norte), si no es por motivos de estricta necesidad, laborales o para regresar al lugar de residencia.
Tampoco se permite cambiar de región para alcanzar segundas casas.
De este modo los italianos emprendieron el viaje de regreso a sus casas ya desde el pasado fin de semana, el último de posibilidad legal de hacerlo, sobre todo desde el industrializado norte hacia el sur.
Por ello en estos días ha sido prácticamente imposible encontrar un billete de tren disponible y los pocos que quedaban era a precios elevados.
La fecha límite para volver al hogar es el miércoles, pues al día siguiente, el 24 de diciembre, Nochebuena, el país quedará confinado durante todo lo que queda de semana, hasta el domingo.