La presidenta del Partido Demócrata de Florida (FDP), Terrie Rizzo, respondió con ironía este viernes al anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que cambió su residencia de Nueva York a Palm Beach: ‘no es la primera persona que se radica en Florida para retirarse’.
Rizzo habló así tras informar de los pasos que los demócratas de Florida van a seguir para no cometer ‘los mismos errores’ de 2016 y lograr que los votantes de este estado clave le den la espalda a Trump en las elecciones de 2020, cuando buscará la reelección.
De ahí, la mención a una ‘retirada’ o jubilación de Trump hecha por Rizzo, que aseveró que están ‘determinados’ a cortarle al presidente el camino hacia un nuevo mandato.
Florida es un estado clave en las elecciones presidenciales, no solo porque le brinda al ganador un importante número de votos en el Colegio Electoral, que es donde al final se decide quién es el ganador, sino porque no tiene un patrón de voto fijo y lo mismo puede inclinarse por los republicanos que por los demócratas.
En 2012 votó por Barack Obama y en 2016 por Trump.
Rizzo aseveró que los demócratas de Florida están ‘determinados’ a poner de su parte para que Trump sufra una derrota electoral en 2020 y, por eso, desde 18 meses antes de las elecciones han comenzado un ‘esfuerzo organizado’ para la victoria.
Los electores jóvenes, los afroamericanos y los hispanos son tres grupos ‘clave’ de floridanos a los que el Partido Demócrata de Florida quiere atraer a sus filas, según Rizzo.
Ya han recaudado 5,2 millones de dólares y contratado un equipo de 91 personas, el más nutrido de todas las secciones estatales del Partido Demócrata, además de juntar a 34.000 voluntarios, un 1.221 % más que en 2015, el año previo a la victoria electoral que llevó a Trump a la Casa Blanca.
Fomentar el registro de nuevos electores es uno de los ejes de la campaña. Desde junio se han hecho más de 17.000 registros y el objetivo es llegar a julio de 2020 con 200.000 nuevos electores.
Otro es luchar para reducir el número de potenciales votantes a los que por diversos motivos se les priva del derecho al voto, algo que en Florida ocurre ‘365 días al año’, según un comunicado del FPD.
Este jueves Trump confirmó que ha cambiado su domicilio y el de su familia de Nueva York, donde nació y vivió durante décadas antes de llegar a la Casa Blanca, a Palm Beach (Florida), donde tiene su mansión y club privado, Mar-a-Lago.
Previamente el diario The New York Times había informado de ese cambio de domicilio legal, que, según Trump, se debe a que en su ciudad le han ‘tratado mal’, pero, según los medios, puede deberse a que el régimen fiscal de Florida es más ventajoso para las grandes fortunas. EFE